viernes, 3 de julio de 2009

Sueña que está viva.


Le gusta perderse en la ínfima infinidad.
Le encanta recordar cosas que aún no han sucedido mientras huele el café, sólo lo huele, detesta su sabor.
Sus mejillas se vuelven rojas cuando él la sonríe, en el fondo es una chica tímida. Se vuelve apasionada buscando un beso sincero, se vuelve de piedra cuando no encuentra ninguno.

La melena oscura ondea al viento cerca de las olas y sus dedos se pierden en la arena fina y fría. Lo único que llena casi del todo su corazón son las notas de la melodiosa voz de la clave de sol. En la clave se refugia. Lo hace de noche y de día.
Cada crepúsculo especial su piel se torna cálida, aunque sabe que dentro la gelidez sigue intacta. Y justo antes de morir de frío, una vez más sus pulmones se llenan de aire y late vida. Sueña que está viva.

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