jueves, 24 de septiembre de 2009

INSPIRA, RESPIRA.

Y ahora que todo había cambiado vuelve a cambiar, por fin mi mente estaba despejada, se ha vuelto a nublar.
Por las noches pienso si es mejor morir o respirar porque a esas horas sólo te puedo vislumbrar de una manera: Ese instante, preciso, directo, en el que horas antes me has sonreído y me ha dado una vuelta al corazón, joder, aún noto las putas mariposas y los pájaros de mi cabeza pían que tú también las sientes.